
Pregunta:
Respuesta:
No hay evidencia bíblica que estipule que debamos asistir a Misa el domingo, aunque dicha asistencia está de acuerdo con los principios bíblicos.
Participar en la misa dominical es una ley eclesiástica que la Iglesia impone para ayudar a los fieles a cumplir la ley moral de adorar a Dios, y hay evidencia bíblica de que la Iglesia tiene la autoridad para hacerlo. Considere Mateo 18:18: “Todo lo que atéis en la tierra quedará atado en los cielos, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en los cielos”.
Implícita en este mandamiento está la autoridad para gobernar la forma en que el pueblo de Dios lo adora en el Nuevo Pacto, incluida la designación del Día del Señor (domingo) como el cumplimiento del precepto moral detrás del tercer mandamiento. Así como los apóstoles y los ancianos decretaron imponer ciertos preceptos disciplinarios a los gentiles recién convertidos (Hechos 15, por ejemplo, abstenerse de carnes ofrecidas a los ídolos, etc.), también la Iglesia impone el precepto disciplinario en cuanto a cuándo debemos adorar a Dios. .
Por lo tanto, es prerrogativa de la Iglesia estipular la forma en que vamos a cumplir con la obligación moral de adorar a Dios: participar en la Misa del domingo.
La razón fundamental detrás de este precepto es, en primer lugar, la ley moral de que debemos reservar algún tiempo en nuestras vidas para adorar a Dios. En segundo lugar, Cristo reveló que la Misa es la forma en que él quiere que adoremos a Dios (“Haced esto en memoria de mí” [Lucas 22:19]). Y tercero, los primeros cristianos se reunían el primer día de la semana para “partir el pan” (Hechos 20:7), que era un modismo utilizado por los primeros cristianos para referirse a la celebración eucarística.
Teniendo en cuenta estos principios, la Iglesia, con el tiempo, eligió el domingo, a imitación de los primeros cristianos, sería el día en que nosotros, como católicos, adoraríamos a Dios de la manera que Cristo quiso que lo hiciéramos y cumpliéramos la ley moral de sacar tiempo para adorar a Dios.