
Pregunta:
Respuesta:
Si por “salvación universal” te refieres a que todo aquel que alguna vez cometió un pecado mortal se arrepiente perfectamente antes de morir y es purificado en el Purgatorio y finalmente llega al cielo, entonces no, no es herejía. La Iglesia enseña que todos los que mueren en un estado de pecado mortal sin arrepentimiento van al infierno por la eternidad. La Iglesia enseña que el infierno es real y eterno, pero no enseña que ninguna persona en particular haya muerto verdaderamente en un estado de pecado mortal impenitente porque eso es imposible de saber.
Dios no predestina a nadie para ir al infierno; para ello es necesario un alejamiento voluntario de Dios (pecado mortal) y perseverar en él hasta el fin. En la liturgia eucarística y en las oraciones diarias de sus fieles, la Iglesia implora la misericordia de Dios, que no quiere que “ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento” (CIC 1037).
Si con esa frase quieres decir que el infierno es sólo temporal o que todas las almas van al cielo sin importar lo que hayan hecho en la vida y si se arrepienten, entonces eso es ciertamente una herejía. Esta herejía recibe varios nombres: reconciliación universal, salvación universal o universalismo cristiano.