
DÍA 32
RETO
“Los católicos no deberían llamar 'Padre' a los sacerdotes. Jesús dijo: 'A nadie llaméis padre vuestro en la tierra, porque un Padre tenéis, que está en los cielos' (Mateo 23:9)”.
DEFENSA
Jesús estaba usando una hipérbole. Otros pasajes del Nuevo Testamento indican que los ministros de Cristo tienen una forma de paternidad espiritual.
La hipérbole es una exageración para dejar claro un punto. Es una característica común del discurso bíblico, como cuando Jesús dice que sus discípulos deben “odiar” a los miembros de su familia (Lucas 14:26; una paráfrasis no hiperbólica de este pasaje se da en Mateo 10:37).
Jesús no quiere decir literalmente que no se puede llamar “padre” a nadie en la tierra. Si así fuera, entonces no podríamos llamar a nuestros propios padres biológicos con este término, lo cual sería absurdo. También privaría a nuestra comprensión de la Paternidad de Dios de su marco de referencia terrenal (CIC 41, 238-39).
El punto de Jesús es que no debemos confundir el tipo de paternidad que Dios tiene, que es definitiva, con cualquier otra forma de paternidad, que es limitada y provisional. Utiliza un lenguaje hiperbólico para exponer este punto de una manera llamativa y memorable, pero no espera que la hipérbole se tome literalmente.
Así, otros pasajes del Nuevo Testamento indican que los ministros de Cristo tienen el papel de padres espirituales. Pablo se refiere a cómo llegó a ser el padre espiritual de los corintios (1 Cor. 4:14-15). Se refiere a los gálatas como a sus hijos pequeños (Gál. 4:19) y a Timoteo (1 Cor. 4:17; 1 Tim. 1:2, 18; 2 Tim. 1:2, 2:1), Tito ( Tito 1:4), y Onésimo (Fil. 10) como sus hijos espirituales. Pedro se refiere a Marcos como su hijo espiritual (1 Ped. 4:13), y Juan se refiere a sus lectores como sus hijos pequeños (1 Juan 2:1; 3 Juan 4).
Este es un modo de hablar estándar en el Nuevo Testamento, compartido por múltiples autores, incluidos testigos presenciales de Jesús (Pedro y Juan). Esta práctica generalizada entre los apóstoles subraya aún más la naturaleza hiperbólica de la declaración de Cristo.
El patrón también indica claramente el papel que tienen los ministros de Cristo como padres espirituales, y si alguien tiene un papel particular, es veraz referirse a él por ese papel. Dios no se opone a esto, y la Iglesia sigue el ejemplo apostólico cuando se refiere a la paternidad espiritual de los sacerdotes.